SANTUARIO NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA
SORACÁ, TUNJA
COLOMBIA
Yo te doy mi Bendición querido Hijo….. Yo te Bendigo querido hijo….yo, te bendigo querido hijo, porque quiero que digas a todos mis peregrinos que en este momentos son todos bendecidos; Están todos bendecidos porque todos ustedes son míos, ustedes mis pequeños son míos, porque son míos YO los cuido, YO los protejo, YO no los dejo, YO los tengo, YO los amo, pequeños Míos, YO Soy la Señora, YO Soy la Ungida, La Escogida, La Predilecta, Yo Soy de DIOS y DIOS es Mío y ustedes son de Nosotros Dos. Mi Padre DIOS con Mis Labios también Les Dice: “ A todos les bendigo”. Primera vez en los labios de La Señora aparece las palabras de Papá Dios diciendo, “Yo los bendigo”. Papá Dios, nos ha bendecido.
YO Soy la Señora, ustedes son míos, YO soy la Señora, ninguno está perdido, YO la Señora té protegeré, cuidaré, ayudaré, para que tu vida sea conforme a la Voluntad de DIOS. Quiero que seas eterna propiedad de DIOS. Quiero que así como ustedes me quieren, ustedes quieran a Nuestro Padre DIOS. Nuestro Padre DIOS, también está aquí, en este momento entré nosotros, Papá DIOS está aquí. Comprendemos que la Bendición del Padre Dios, que Papá DIOS nos ama, es por eso porque EL está aquí, es por eso. La Señora se refiere a que DIOS está aquí en Jesús de Nazaret, porque Jesús de Nazaret, es Padre, es Hijo, es Espíritu Santo.
Mis pequeños, ustedes deben preparasen, ustedes, muchos están muy confundidos. Muchos tienen miedo, ciertamente hay mucho miedo, hay mucho fuego, hay mucha sangre.
Hijo, cuéntales a ellos, que estén preparados para un gran desastre, no de la naturaleza, sino la humanidad. Morirá alguien que amo mucho, prepárense mis pequeños. La Virgen muestra mucho fuego, la Virgen muestra mucha sangre, la Virgen muestra uno solo muerto, La virgen habla de mucho miedo, pero la Virgen nos dice: “No duden, que YO los acompaño, que YO los protejo”.
La Señora habla de un momento, hace un momento, la Señora habla, que por todos los que vinimos hace un mes (julio) al Santo Rosario, se evitó lo que iba a suceder en el planeta, la Señora no lo permitió.
Hijos, mis pequeños, quiero que recen mucho ( se escucha un fuerte viento y las banderas empiezan a ondear ) quiero que no descansen de buscar a todo momento la Luz de Dios. Oren, Hagan momentos de oración, porque ustedes son ustedes desde aquí están haciendo posible la salvación de toda la humanidad.
Hijito Mío, conserva tus manos prontas para bendecir, como mi Hijo Jesús, queremos seguirte tomando como instrumento, haz lo posible por no desfallecer.
La Señora en este momento, toca a todos ustedes, a todos ustedes, les toca en este momento sus oídos, ¿no sé porque?. Pero veo que la Señora, a todos toca sus oídos. Las Manitas de la Señora, están en los oídos de todos ustedes. La Señora, Bendice sus familias, la Señora dice: “ Sus Familias son mis Familias, YO las bendigo”.
Al regreso de muchas familias, a muchas familias de ustedes, encontrarán que sus enfermos se han sanado y muchos quieren saber de lo que tu recibiste aquí, y en tus familias empiezan a existir grandes conversiones.
La Señora habla de amar mucho, mucho, mucho la Familia.
Mis pequeños, mis más pequeños, sean ustedes por mi Bendecidos ahora. Falta muy poco, se terminará el secuestro en esta Patria. Vamos a esperar que la Señora confirme los mensajes que nos acaba de transmitir, como son palabras humanas transmitida por labios de pecador, la Señora confirma con algún signo de que estos mensajes son de ELLA, (empieza a sentirse quietud, después comienza una brisa suave y durante tres segundos es fuerte, dura siete el signo, se constata con la grabación que realicé en el mensaje). Son de ELLA lo acaba de confirmar.
Confiemos entonces, que esos mensajes son de esperanza, aquí (Santuario Nuestra Señora de la Esperanza, ubicado en Soracá, Departamento de Tunja en Colombia) no se da muerte, aquí todo lo que ELLA transmita es Vida. Y Aquí lo que ELLA dice lo que se tiene que cumplir no puede dejarse de cumplir más no cómo debería de suceder. Conviértanse ustedes en apóstoles, en testigos, en misioneros de todo de lo que aquí sucede y comuníquenlo sin miedo y díganlo, La Señora lo dice, la Señora lo dijo, y cuando lo sepamos, estemos tranquilos, porque ya ELLA nos lo había revelado.
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